Laura Vega, magnífica compositora canaria, nos deleitó con una charla muy interesante sobre «la mujer en la creación musical». La falta de referencias femeninos en los libros de historia de la Música, o la casi inexistente programación musical de obras compuesta por mujeres fueron algunos de los aspectos que nos presentó y debatimos. Pero sobre todo nos quedamos con su humanidad y cercanía, y su trayectoria vital que tan generosamente compartió con todos nosotros. Fue una mañana mágica.
Fue magnífico compartir esa mañana tu obra Galdosiana en el concierto celebrado en el Auditorio Nacional de Madrid a cargo de la Orquesta Nacional de España. Tu música nos envolvió esa mañana de enero y sé que fuimos felices al escucharla.
Gracias de corazón Laura.
Estamos felices de haber compartido el día más hermoso de nuestra vida en tu compañía. Te agradecemos mucho tu presencia. Es forjando que uno se convierte en músico. Así que la vida sin música es simplemente un error, un cansancio, un destierro porque la música es una revelación más alta que cualquier sabiduría y cualquier filosofía. Ahuyenta el odio en los que están sin amor y da paz a los que están sin descanso, consuela a los que lloran, así la música da alma a nuestros corazones y alas a los pensamientos. Es ver seres demasiados bajo su verdadera luz de la anchura. La lucidez es un exilio construido, una puerta de emergencia, el vestuario de la inteligencia. También es una enfermedad que nos lleva a la soledad.
En este caso por todo lo que acabas de decir y demostrar, podemos ver que había cierto compositor cuya música siempre hacía latir su corazón. Y esa música a veces sonaba como pequeños pedazos de cristal de colores, y a veces era la cosa más dulce y triste que puedas imaginar. Por eso el Piano y la Guitarra son compañeros, cómplices, siempre dispuestos a hacerse eco de nuestros sentimientos, de nuestro estado de ánimo. Un amigo puede contradecirnos, mentirnos, traicionarnos, el Piano y Guitarra nunca miente, contradice o traiciona al Pianista o al Guitarrista. Es un confidente, siempre dispuesto a escuchar. Sólo repite lo que se le encomienda si el compositor se lo impone. La música es un arte que dice lo que ningún lenguaje puede decir, hay profundidades en el alma humana que callan, ella da voz a su silencio y a través de ella conocemos ese no sé que está en nosotros y que no habla.
!Qué seríamos sin la música¡ La música es el lenguaje de emociones. La música es el alimento del amor. La música es la voz del espíritu. La música es el único placer sensual sin vicio. Entonces la vida es como la música es corta, hay que escucharla bien.
Gracias LAURA VEGA, esta señorita merece aplausos.
Alioune Ali Samb Dia, alumno de la Escuela MeSumaría. Para Laura Vega.